David Paz, no solo lleva la música en el alma y como todo artista, tiene diferentes matices en los que predominan los colores como amante de las Artes Plásticas. Con motivo del 60 aniversario de la desaparecida Escuela Normal España, pintó un mural que plasma imágenes de toda la historia de triunfos y éxitos de una de las mejores instituciones educativas de Honduras. En el Centro regional de la Universidad Nacional (UNAH-TEC-DANLÍ), el mural conmemorativo a la vida y obra de la escritora Lucila Gamero de Medina. Y el reciente mural alegórico para la sala de estimulación temprana del Centro de Rehabilitación, “Gabriela Alvarado”.
Consultado sobre las motivaciones que lo indujeron a la música, dice que en su familia siempre existió la vena artística, “casi todos ejecutan algún instrumento o realizan actividades relacionadas con el arte, sin embargo, la principal fuente de inspiración fue mi abuelo José Antonio Paz (Don Toño) quien siempre me motivó y enseñó los principios de la música, arte que le apasionaba tanto, a tal grado de construir sus propios instrumentos como mandolinas, violines y violoncelos. A parte de ello tenía una caligrafía musical muy buena, cuando escribía sus partituras. Creo que la noticia que le agradó tanto, fue cuando le manifesté que iba a estudiar música de manera profesional en la Escuela Nacional de Música. Sus ojos irradiaron ilusión y esperanza al saber que su gran pasión tendría continuidad a través de mi formación. Pero no solo la música fue su legado, ya que aprendí de él, el arte de diseñar, de crear y utilizar el tiempo en la transformación de materiales que cualquiera desestimaría como útiles”.
La etapa de mi vida en la que dediqué empeño, fue cuando decidí estudiar en la Escuela Nacional de Música, porque desde el examen de inscripción se convirtió en todo un desafío, pues ya pasaba de la edad que estipulaban las autoridades del centro educativo, como requisito para ingresar. Sin embargo, después de suplicarles la oportunidad, accedieron a hacerme el examen de admisión, que consistía en vocalizaciones y ejercicios rítmicos. Al realizarlos sin errores, me aceptaron, quedando becado por toda la carrera.
¿Cuente su recorrido hasta hoy en el ámbito artístico? Desde muy niño sentí la inquietud por las manifestaciones artísticas, inspirado por mi abuelo materno José Antonio Paz, quien fue integrante de la banda de los “Los Rojas” grupo que se destacó por su exquisito repertorio sacro y secular. Fue mi abuelo que desde muy niño ejecutaba su violín o violoncelo en las noches y en el día, abría su viejo baúl donde tenía su “tesoro musical” que eran sus partituras de misas escritas para varios instrumentos. Aprovechaba cuando íbamos “al cerro” y sentía tan agradable cuando cantaba a viva voz y tan fuerte para escuchar el eco que se producía. Eso era mágico para mi….. Así que la música y la pintura a pesar de ser disciplinas diferentes, pues en ambas se encuentra: armonía,( armonización de colores y armonización de sonidos) planos musicales y planos perspectivos.