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Tegucigalpa,Honduras jueves 10 de septiembre
Llena de sueños y con la ilusión que al regresar a nuestro país buscará apoyar al sistema educativo, en cuanto a la enseñanza de un segundo idioma, Meylin Oseguera viajará a Taiwán, para cursar una maestría en Lingüística Aplicada.
Meylin, fue seleccionada por el programa Ministerio de Relaciones Exteriores (MOFA, por sus siglas en inglés) y el Fondo de Cooperación y Desarrollo Internacional (ICDF), que ofrece la República China-Taiwán, a jóvenes con excelencia académica de los países aliados.
La joven hondureña permanecerá por tres años en Taipéi, el primer año aprenderá el idioma mandarín, y así iniciar su especialización en la prestigiosa National Taiwan Normal University, Applied Linguistics.
Oseguera eligió esta maestría porque, según relata, su sueño es fundar un centro de idiomas e intercambio cultural, dirigido a niños y jóvenes de escasos recursos económicos del país.
En una corta entrevista ofrecida a Diario LA TRIBUNA, Oseguera se manifiesta complacida, que “Desde diciembre del año pasado decidí junto con un amigo, buscar becas para seguir estudiando y en enero de este año dos amigos me hablaron acerca de esta beca que ofrecía Taiwán, y fue así que comencé a buscar información de universidades y programas, para luego hacer el proceso de aplicación, siendo seleccionada”, comenta feliz.
Meylin nació en Dulce Nombre de Culmí, Olancho, el 9 de febrero de 1996. Es licenciada en Lenguas Extranjeras con Orientación en Inglés, título que obtuvo en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) el 20 de septiembre del 2019.
Proveniente de una familia muy trabajadora, ha sabido luchar por cada uno de sus sueños con el apoyo incondicional de sus padres,
María Ancelma Núñez e Ignacio Oseguera Martínez, ambos oriundos de Nacaome, Valle. Es la menor de 8 hermanos -5 mujeres y 3 varones-.
Oseguera estudió su primaria en la Escuela Ramón Rosa, y el ciclo común en el Instituto Oficial 6 de Abril (2008-2010), en 2011 ingresó a la Escuela Normal Mixta de Olancho en Juticalpa. Durante ese año vivió y compartió con alrededor de 25 jóvenes, también estudiantes de bajos recursos económicos. Según explica, ella nunca se imaginó que podría continuar sus estudios superiores, por las dificultades económicas que vivía, hasta que una tarde, mientras regresaba de su práctica profesional se encontró con un volante de la UNAH, con los pasos a seguir para aplicar al examen de admisión a ese centro de estudios.
Gracias a que en el hogar donde residía había una sala de computación, pudo aplicar a la universidad y fue aceptada. El 2014 se trasladó a vivir Tegucigalpa, iniciando así su vida universitaria, en la que al finalizar su primer año de estudios, y gracias a su excelencia académica, fue becada por parte de la Alma Máter, hasta el año 2017, luego, dice, aplicó a una beca del gobierno, originalmente llamada Beca 91, hoy Becas Honduras 2020, logrando culminar su carrera.
“En el 2019 me gradué y me siento honrada y orgullosa en decir que soy la primera de mi familia en ser egresada de educación superior. Todo se lo debo a Dios, al esfuerzo y apoyo de mis padres y familia”, afirma Meylin.
Entre sus metas está encontrar formas efectivas para el aprendizaje de idiomas y a partir de eso, adaptarlas a las necesidades más grandes de la niñez hondureña. Otro de sus anhelos dice es trabajar en una ONG y fundar un centro de idiomas e intercambio cultural para niños y jóvenes con mentes brillantes, que son opacados por la pobreza y desintegración familiar.
Meylin es un ejemplo de que todo se puede, si realmente te lo propones. Ella, a pesar de sus dificultades económicas logró obtener su título universitario, algo que le parecía imposible, y hoy, gracias al gobierno de Taiwán, que le otorgó una oportunidad de estudios, culminará su maestría.
Fuente: La Tribuna
