Tegucigalpa, Honduras martes 05 mayo 2020
Juana Aguilar es una enfermera que reside en el barrio El Centro, de Cofradía, Cortés; sus vecinos la reciben con aplausos todas las noches al transitar hacia su casa, ya que trabaja en el Hospital Mario Catarino Rivas y está en esa primera línea de atención a los pacientes con COVID-19.
La enfermera es conocida por sus vecinos como “Juanita” y aseguró que cuando escucha los aplausos se siente emocionada y no tiene palabras para describir su alegría y agradecimiento porque el personal de salud se siente apoyado al ver un gesto de estos.
“Me siento horada por mis vecinos, ya que ellos con su lindo gesto me han dado más fuerzas y valor para seguir adelante trabajando en esta labor”, manifestó Aguilar.
Agregó que pensaba que solo en otros países ocurría algo así, pero con el noble acto es algo mucho valor para ella.
Varios vecinos de la enfermera aseguraron que está entregada a su labor y que tiene un corazón muy noble porque a todos les ayuda y cuando necesitan inyectarse ella lo hace sin cobrarles y solo expresa que está para servir a los demás.
Fuente: El Pais