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08.12.2025
Expertos en nutrición y cardiología destacan que algunos alimentos congelados ofrecen beneficios significativos para la salud cardiovascular. Además de ser prácticos y accesibles, conservan su valor nutricional y se integran fácilmente en la dieta diaria, según María Laura Haddad-García, dietista de la Universidad de Granada (España).
Krutika Nanavati, investigadora en nutrición citada por EatingWell, señala que congelar los alimentos permite mantener vitaminas y minerales, lo que convierte a estos productos en una herramienta útil para quienes buscan una dieta cardiosaludable durante todo el año. Además, ayudan a reducir el desperdicio de alimentos y facilitan la constancia en hábitos saludables, lo que disminuye el riesgo de enfermedades cardíacas, hipertensión, accidentes cerebrovasculares, diabetes y problemas renales.
Alimentos congelados recomendados para el corazón
1. Frutos del bosque
Bayas como frambuesas, arándanos, fresas y moras son ricas en antioxidantes que ayudan a reducir la inflamación y el riesgo de enfermedades cardíacas. Conservan sus antocianinas y compuestos fenólicos tras la congelación, favoreciendo la salud vascular y la disminución de hipertensión y aterosclerosis. Se pueden combinar con yogur, avena o cereales.
2. Espinaca congelada
Gracias a su alto contenido de nitratos, la espinaca ayuda a reducir la presión arterial, relajar las paredes de los vasos sanguíneos y mejorar el flujo sanguíneo. Su presentación lavada y picada la hace práctica para batidos, sopas, tortillas o guisos, manteniendo todos sus beneficios nutricionales.
3. Salmón congelado
El salmón aporta ácidos grasos omega-3, esenciales para reducir triglicéridos, inflamación y proteger la salud cardiovascular. La congelación adecuada conserva sus nutrientes, siendo tan saludable como el fresco, y se recomienda consumirlo varias veces por semana.
4. Porotos de soja (edamame)
El edamame es una fuente de fibra, proteína vegetal, potasio y antioxidantes, que ayuda a mantener niveles saludables de colesterol y presión arterial. Puede añadirse a ensaladas, salteados o como snack, aportando nutrientes que benefician al corazón.
Cómo incorporarlos a la dieta
Los especialistas sugieren agregar verduras congeladas a sopas, guisos o pastas, incluir bayas en batidos y postres, cocinar pescado congelado para cenas saludables y usar edamame en ensaladas o platos variados.
Con estas opciones, los alimentos congelados se convierten en aliados prácticos y nutritivos para cuidar el corazón, optimizar el tiempo en la cocina y mantener hábitos saludables durante todo el año.
