Tegucigalpa, Honduras miércoles 10 junio 2020
El ministro de la presidencia Ebal Díaz, dijo ayer que el éxito de este Plan de Reapertura Ordenada y Progresiva, que ya inició, depende de la responsabilidad individual que podamos tener.
La Secretaría de Trabajo ha elaborado los protocolos de bioseguridad con el apoyo de expertos y la contribución mediante asistencia técnica de la Unión Europea.
El plan de reapertura fue propuesto por la mesa multisectorial que integran empresarios, academia, obreros, iglesias, sociedad civil, productores, bancos y cooperativas, entre otros.
El ministro comentó que efectivamente el día de ayer, tal como se había venido comunicando en los días anteriores, inicia el Plan de Reapertura Ordenada y Progresiva, dentro del mismo están las actividades de algunas instituciones gubernamentales que tienen que ver con actividades económicas sensibles de la vida nacional.
Agregó que “seguimos saliendo de manera ordenada por dígito como lo hemos venido haciendo anteriormente, pero se está habilitando a través de salvoconductos y permisos a los trabajadores para que salgan a sus actividades y las empresas con la obligación de aplicar protocolos de bioseguridad en sus instalaciones, también el hecho de la obligatoriedad de todos de usar la mascarilla y distanciamiento social”.
En el caso del Gobierno, se siguen preparando las instituciones. Algunas ya están funcionando con mucho cuidado, pero la mayoría entrará a partir del 15 de junio a funcionar de manera ordenada para evitar que tanto las personas que puedan acudir, como empleados públicos se contagien. Pero en este tema es importante mencionar que el Gobierno le está apostando fuertemente al Gobierno Digital para que todas aquellas actividades, solicitudes y trámites de los ciudadanos, que se puedan hacer lo hagan por vía digital.
También que los empleados cuya presencia en las instituciones no sea tan necesaria y que puedan hacer el trabajo desde su casa, o sea el teletrabajo, deba hacerse así para evitar la aglomeración de empleados públicos con funcionarios en las instituciones. Es decir, es una reapertura que va a buscar el mínimo de asistencia a las instituciones. Justamente porque la constante para poder salir adelante es el aislamiento social.
Hay unas actividades que no van a entrar en esta primera etapa a nivel general como las actividades recreativas, cines, espectáculos públicos y el transporte público no entra todavía, las actividades académicas presenciales, todavía no entran y sigue la educación en línea en lo que corresponde, así que vamos a ir progresivamente.
“También tenemos un mecanismo de veeduría social para garantizar los medicamentos, especialmente los tratamientos MAÍZ y Catracho lleguen al primero y segundo nivel”, aseguró Díaz.
Fuente: El Pais