Crisanto Meléndez (Guayúfuru), director Ballet Nacional Garífuna

Tegucigalpa, Honduras 07 abril 2019

En el “Mes de la Herencia Africana”, uno de los exponentes de cultura garífuna nos cuenta la historia de los pueblos negros desde su llegada a Honduras. Se trata de Armando Crisanto Meléndez, mejor conocido como Guayúfuru Savaranga, nombre que de acuerdo a sus investigaciones correspondía a los reyes africanos. Etnólogo, coreógrafo, dramaturgo, chamán, arreglista, director de baile, boxeador, barrendero y hasta pintor de carro son solo las facetas de este artista hondureño, fundador del Ballet Garífuna Nacional. Todo comienza, dice, el 12 de abril de 1797, cuando el líder Joseph Satuyé fue asesinado y su pueblo fue desterrado de la isla San Vicente a Roatán.

El periodista Andrés Torres (QEPD) lo llamaba Guayúfuro ¿Por qué?
Éramos grandes amigos con el finado, pero ese es mi nombre cultural. Mi mamá me puso Armando Crisanto Meléndez, pero según mis investigaciones, yo vengo de los reyes de África, mi nombre es Guayúfuru Savaranga, que significa trueno y deidad de la guerra.

¿Todos los garífunas tienen nombres culturales o es solo su caso?
De algún modo, todos tenemos nombres culturales; los mestizos, por ejemplo, se llaman María o Juan pero su verdadera identidad es indígena y deberían llamarse Siguatepeque o Copán.

¿Sus hijos tienen nombres ancestrales?
Claro, Satuyé, que vive en Nueva York; el otro se llama Gualumogo, que fue un lagarteniente de Francisco Morazán; mis hijas se llaman Masay y Achanti, la diputada, a todos ellos les puse esos nombres para recobrar la identidad de nosotros.

¿Anduvieron negros con Morazán?
Claro que sí, pero eso no lo enseñan en la escuela ni que El Triunfo de la Cruz fue la primera capital administrativa.

¿Qué conmemoran en el “Mes de la herencia africana”?
Es la respuesta de tanta incidencia con el arte sin violencia. Celebramos la llegada de los garífunas de San Vicente a Roatán el 12 de abril de 1797 tras la muerte del líder Garífuna Joseph Satuyé que se rebeló a la opresión inglesa en la isla San Vicente.

¿Cómo fue su niñez?
Crecí bajo las reglas del respeto, la responsabilidad y la ética en mi casa. Cuando fui a la escuela recibí la primera clase de racismo, después quise ser mestizo para que la sociedad me aceptara. Salí de mi pueblo a trabajar, viví en San Pedro y aprendí a pintar carros; luego, me vine a Tegucigalpa a los 20 años.

¿Qué otras actividades ha hecho?
Fui el primer negro en ir a las olimpiadas como boxeador. Estuve en la guerra con El Salvador en la frontera porque la lengua garífuna era el código de guerra y los salvadoreños no la entendían. Organicé el primer cuadro de danza garífuna en La Ceiba, entrené con el Olimpia pero me salí porque no aguantaba las troleadas al mediodía.

¿Cómo llega a la danza y al baile?
En 1962 se formó la primera danza garífuna en Tegucigalpa, eran reuniones entre familias para no perder la cultura. Así comenzamos, despertamos todo ese sentimiento y ahora toda Honduras se identifica con nuestra cultura.

Especialmente, bailar punta…
Sí, pero deben saber también que eso que bailan no es punta, Sopa de Caracol no es punta, y no se llama punta, el nombre original es bunda y solo se baila en los velorios, tiene un significado ritual.

¿Y entonces qué es lo que bailamos en esos carnavales?
Es que el problema en Honduras es que todo mundo anda copiando cosas que no conoce.

Muchos garífunas tampoco pueden bailar punta ni hablan su lengua, al menos, eso dicen cuando uno les pide que nos enseñen
Es cierto, porque el hecho de tener piel negra no quiere decir que sea garífuna. En Honduras hay negros de habla inglesa con cultura del caribe, calipso y soca. Por eso nosotros no estamos de acuerdo que anden agarrando a cualquier compañero garífuna a dirigir algo, tiene que estar certificado, nosotros somos la institución certificada de la cultura garífuna.

¿Cómo mira la situación del país?
Honduras está muy sucia porque se ha perdido la calidad humana, los medios tampoco ayudan porque solo publican asesinatos, sexo y hablando de gente de Hollywood y no le paran bola al artista nacional.

¿Sigue la discriminación racial?
Todavía hay racismo y exclusión en Honduras. Lo que pasa que nuestras comunidades son autosuficientes, tenemos el mar enfrente que es un supermercado para nosotros, somos ejemplo en muchos aspectos, no van a ver mareros negros en la prensa.

¿Terminará un día esa discriminación?
No será fácil superarlo, aunque no andamos en las calles rompiendo buses para que se nos cumplan nuestros derechos, estamos a la espera de que se incluya en el currículo de Educación una clase sobre la historia contemporánea del pueblo garífuna para que en las escuelas se termine el racismo.

¿Será suficiente?
Todo depende de la visión de cada gobierno, abrir hospitales y universidades regionales, generar empleo, de lo contrario habrá más caravanas y delincuentes.

¿Han ayudado los negros que han llegado a cargos políticos relevantes?
Ahorita nos están apoyando, lo que pasa que el Congreso es otra cosa, hay líneas de partido, pero ahí están luchando.

¿Es difícil aprender a bailar punta?
Se puede aprender, pero se debe conocer primero las bases históricas para entender el baile y no menearse por menear.

¿En su academia enseñan?
Claro, hay muchas personas mestizas que lo aprenden muy bien y corrigen muchas vulgaridades, es un baile sano, erótico pero no vulgar.

¿Se paga por aprender?
Es gratis porque el Estado nos asigna un presupuesto, pero pienso que en las escuelas deben ser enseñanza obligatoria.

¿Qué significado tiene el cazabe para ustedes?
Tanto la machuca como el cazabe son comidas típicas a base de yuca y coco. La gente de antes no padecía de cáncer porque comía bastante cazabe a base de yuca.

Y hasta surgieron muchos cantos, como aquel que dice “pelame la yuca mami/ pa´ que me hagas el cazabe”…
No, no, no, pero eso no tiene nada que ver con nuestra cultura, esa son vulgaridades.

Pero es famosa, la cantan Los Roland de La Ceiba, por cierto, todos ellos son negros.
Sí, son amigos, pero nosotros cuando rayamos la yuca usamos cantos espirituales.

¿Y qué me dice del guífiti?
Es un trago amargo. Lo usan los curanderos, los doctores espirituales, para la gastritis y no para emborracharse.

Pero aquí han vendido la idea que es afrodisiaco
Eso es mentira, no es para emborracharse ni cosas sexuales, es un aperitivo. Tal vez puede servir para la goma por amarguísimo.

¿Cuánto es la población garífuna?
Por todos, somos unos 200 mil viviendo en 36 comunidades, comenzando de Punta Patuca, en Gracias a Dios, hasta Masca en Tela. Otros se fueron a Belice, Guatemala y Nicaragua. En Nueva York hay como 80 mil.

¿Han ayudado los proyectos hoteleros cerca de estas comunidades garífunas?
No, porque no consultaron a las comunidades, pero seguimos sobreviviendo, frente a otros grupos como los pech que están desapareciendo.

¿Perdieron la espiritualidad ancestral?
Seguimos guardando los tres elementos esenciales de la vida para nosotros: Sombra, alma y espíritu, nuestros chamanes consideran la muerte es un proceso más de la vida, nuestros abuelos nos enseñaban a compartir, no ser mezquinos, como el Thanks given de los gringos y los árabes.

¿Le gusta bailar?
Yo soy bailarín desde que llegué aquí. Daba guerra en el Centro Social Universitario.

Yo he escuchado que los negros de habla inglesa les dicen negros de playa a los garífunas ¿Persiste esta discriminación?
Así fue un tiempo, pero ahora se están acercando.

De los políticos y deportistas famosos ¿Quiénes son garífunas?
Casi todos, por ejemplo, la diputada Johana Bermúdez y el diputado Osman Chávez son garífunas. Gilberto Yearwood es de habla inglesa.

Dicen que el expresidente Lobo Sosa tiene su ramalazo negro ¿Usted qué sabe?
Todos lo tienen, nadie se salva, aunque lo que tienen son ramalazos blancos porque la civilización humana nació en África.

¿No creo que Micheletti tenga ramalazo negro?
Es bien raro, pero cuando fui a las olimpiadas de México vi unos rusos y me contaron que sus tatarabuelos eran negros.

¿Alguna vez le dijeron apodos por su color de piel?
Cuando llegamos a Tegucigalpa nos decían chorro de humo, anafres, estufas, pitoretas. Cuando los negros comenzaron a meter goles en la selección nacional también comenzaron a meter goles con las mestizas. Por ejemplo, mis cuatro hijos son 50/50.

¿No se siente mal que le digan negro?
No, fui el primero que gritó “soy negro y qué” en el Parque Central de Tegucigalpa, pero al que me dice negro por ofender le digo payulo, pero solo para defenderme.

Pero también hay muchos negros que son discriminativos con los mestizos…
Es que la discriminación siempre va existir: Usted nunca se va a casar con una hija de Facussé ni Ferrari, porque ahí vale mucho el billete.

Les achacan que son haraganes y ponen a descamar los pescados a las mujeres ¿Es cierto?
No es cierto. Lo que pasa es que los pescadores se levantan a las 3:00 de la mañana y regresan a las 6:00 am y deben descansar.

¿Cómo se lleva con los otros líderes?
Muy bien y me ha valido que yo trabajo con la cultura y no permite pleitos. Yo no soy político.

Los futbolistas garífunas famosos, ¿se han proyectado con sus comunidades?
Sí, por ejemplo, Tyson Núñez, les ha ayudado con canchas en La Ceiba.

¿De qué participó en las olimpiadas?
Era boxeador.

¿Y ganó?
No peleé.

¿Cómo así?
Los directivos, por andar pijineando, no me inscribieron cuando llegó mi turno. Clovis Morales sí corrió.

Fuente: La Tribuna