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Tegucigalpa, Honduras. 03.02.2017
No cabe duda que la fe cristiana prevalece en los corazones de los hondureños; más de dos millones de católicos llegarán a la basílica para celebrar los 270 años de la presencia de la Virgen de Suyapa.
Son innumerables los milagros que ha hecho la Virgencita a personas que con mucha devoción le han solicitado algún milagro.
Ayer a las 10:00 pm inició la alborada por la Virgen a quien millones de católicos llegaron a rendirle tributo por sus múltiples milagros.
Los feligreses llegan de todas parte del país, ya que muchos no pueden dejar pasar desapercibido este día especial para la comunidad católica de Honduras.
Cada 3 de febrero el calendario marca el aniversario de la patrona de los hondureños, la Virgen de Suyapa, cuya su imagen fue encontrada un día como hoy de 1747 en la aldea El Piligüín.
Ayer a las 10:00 pm comenzó la alborada de Nuestra Señora de Suyapa, la que se extendió por varias horas.
A lo largo de la feria en honor a La Morenita, los visitantes han sido partícipes de unas 90 eucaristías, las que se celebraron en el altar mayor de la ermita y en la basílica.
También se han realizado varias marchas que ha encabezado la Virgen Peregrina y que desde el inicio de la novena se han hecho unas 15 procesiones.
“Sabemos que es Jesús, el Hijo de Dios, el que obra los milagros y que la Virgencita de Suyapa los lleva de la mano hacia él e intercede por ellos”, expresó Carlo Magno Núñez, rector de la basílica.
El Piligüín, aldea milagrosa adonde se encontró la Virgen de Suyaya En 3 de febrero de 1747, el labriego Alejandro Colindres y el niño Lorenzo Martínez, quienes habitaban en la aldea de Suyapa, cumplían sus labores como agricultores y no imaginaron que sus vidas cambiarían. Para su sorpresa estaban destinados a ser los portadores de la buena noticia: el hallazgo de la imagen de la Virgen.
Asistencia
Ante esta masiva movilización de fieles religiosos se han postrado ante La Morenita miembros del Cuerpo de Bomberos y las Fuerzas Armadas.
Para los católicos que llegan del interior del país se han instalado carpas para que no duerman a la intemperie.
Las muestras de veneración son muchas; hay un grupo de 250 apóstoles que sienten el deseo de ayudar al prójimo y se han organizado para atender a todos los peregrinos que llegan de tierra adentro o de la ciudad a visitar a la Virgencita. Entre sus actividades están llevar a los visitantes hacia las bancas y sillas habilitadas para apreciar a la Patrona de Honduras.
De igual manera, se convierten en guías históricos para explicar el significado de los retablos, vitrales, altares, imágenes religiosas y otros.
Ellos llegan de diferentes sectores de la capital.
Fuente: laprensa.hn
