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Tegucigalpa. 21.08.2023
La presidenta del Sindicato de Trabajadores del Hospital San Felipe (Sitrasanfe), Iris Zelaya, detalló que más de mil pacientes oncológicos están a la espera de sus tratamientos de radioterapias.
“En el mes de junio eran como 480 los pacientes que estaban a la espera de una radioterapia, ya ahorita crecido exponencialmente y son más de mil pacientes que están en lista de espera para ser tratados”, explicó.
Detalló que las dos bombas de cobalto que tiene el hospital se encuentran en mal estado, y que las autoridades han manifestado que no se pueden reparar, pero que falta es “voluntad”, porque las dos tienen solución.
“Las dos tienen arreglo, la 100 es más inmediato, porque solo es la compra de unos controles, no se necesita montón de dinero para poner a trabajar esa bomba. Y la 80 que es más vieja sí necesita una buena inversión. Una bomba vale como 20 millones, cuánto gastan en ese Congreso para viáticos”, explicó.
Manifestó que pude existir una mala intención de que las bombas permanezcan en mal estado, ya que se nombró a un médico en área de radioterapia que “sorpresivamente es miembro, socio o colaborador del Centro de Cáncer Emma Romero de Callejas”.
Zelaya, aseguró que este nuevo jefe del área de radioterapia tuvo la iniciativa que los pacientes vayan a recibir atención a los centros privados con los que la Secretaría de Salud (Sesal), estaría firmando algún convenio.
“No sé cuánto dinero habrá de por medio, para que los pacientes del San Felipe vayan a los centros privados. Cada paciente mínimo son 25 sesiones y cada uno cuesta entre 2,000 y 2,500 lempiras. No sé, si es el negocio de su vida o si están pensando en salvar estas vidas”, condenó.
Por su parte el presidente de la Asociación Nacional de Empleados Públicos (Andeph), Elvin Canales, informó que están solicitando la intervención del Hospital San Felipe, debido a la situación que se vive en el centro asistencial.
“Estamos planteando la situación actual que se vive en el Hospital San Felipe, habido profunda información del sindicato donde se manifiesta las debilidades concretas, que son una irresponsabilidad de las autoridades que no han podido encajar para conducir el hospital de especialidades”, señaló.
Asimismo, lamentó que existen deficiencias en la atención de los pacientes oncológicos en las distintas áreas de su tratamiento, y responsabilizó a las autoridades por no haber podido ejecutar el presupuesto del 2022.
Mientras el titular de la Sesal, José Manuel Matheu, detalló que se ha dado la orden para que se realice una contratación directa con los dos únicos centros de atención de cáncer.
“Sé que nos exponemos a que nos critiquen, pero yo no puedo esperar seis meses para darle un tratamiento a las personas, entonces se hará con los dos únicos centros privados y se pagará del presupuesto de la Sesal”, destacó Matheu.
Al tiempo que aseguró que se está priorizando en la atención oncológica del hospital que más adelante contará con un búnker oncológico que está valorado en 50 millones de lempiras, así como dos mamógrafos que ya están funcionando tras cinco años sin poder tener exámenes de cáncer de mama.
Mientras los pacientes se quejan por la falta de las radioterapias, que retrasa sus tratamientos y que hace que su cuerpo recaiga considerablemente arriesgando su vida.
“Por favor a las autoridades que pongan de su parte, cómo vamos a pagar una cosa de estas, si somos personas que venimos a un hospital público es porque no tenemos para una clínica, menos para pagar algo así”, condenó la familiar de un paciente.
DATOS
Por su parte el director del Hospital San Felipe, Carlos Murillo, señaló que las bombas de cobalto que son obsoletas, que están “completamente inservibles”, que debieron ser cambiadas desde hace diez años.
“Esta administración y este gobierno se ha comprometido con dar una respuesta y volver el hospital un verdadero centro oncológico. Se ha hecho múltiples gestiones para que esto sea una realidad”.
“Y Dios nos lo permite antes de un año podríamos contar con un centro adecuado de radio oncología, con un acelerador lineal de última generación, y un segundo acelerador que se está tratando mediante un convenio con la Fundación del Niño con Cáncer”, aseguró Murillo.
