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El yacimiento de Atapuerca cierra una campaña «pródiga en hallazgos arqueológicos y paleontológicos», afirman desde la fundación que lleva su nombre en un comunicado en el que hacen balance de un mes de excavaciones. Sin duda, la gran protagonista ha sido la cara parcial de un ser humano, que vivió en la sierra de Atapuerca hace en torno a 1,4 millones y cuyos restos acabaron en la Sima del Elefante. Su descubrimiento fue hecho público pocos días después, pero entonces no tenía nombre. Ahora, el equipo liderado por los investigadores Juan Luis Arsuaga, Eudald Carbonell y José María Bermúdez de Castro ha decidido bautizarlo como ‘Pink‘, en honor al grupo de rock británico Pink Floyd y a su disco ‘The Dark Side of the Moon‘ (El lado oscuro de la [cara] de la luna).
Estos restos, que constan de los fragmentos que componen la parte izquierda de una cara: un maxilar, el borde de la nariz, el hueso malar (que forma la mejilla y una parte de la cavidad del ojo) y los alveolos de los dientes, fueron encontrados en el sector K29, a dos metros por debajo de una mandíbula que la sima ya reveló en 2007 y que entonces se fechó entre 1,1 y 1,3 millones de años.
«La campaña 2022 en el yacimiento de Sima del Elefante debe ser calificada como extraordinaria -señalan desde la Fundación Atapuerca-. Las evidencias de la presencia de grupos de homininos (subtribu de primates homínidos caracterizados por la postura erguida y la locomoción bípeda antecesora del Homo sapiens) en cronologías en torno a 1,4 millones de años (nivel 7) empezaron a apuntarse en la campaña pasada con el descubrimiento de una lasca de cuarzo. A inicios de la campaña actual la identificación de marcas de corte sobre un fragmento de costilla de un animal de talla media (tipo ciervo) confirmaba dicha presencia humana en la sierra de Atapuerca. Sin embargo, el hallazgo de la cara parcial de un homínido marca un nuevo hito en relación con las ocupaciones humanas más antiguas de Europa, hace alrededor de 1,4 millones de años«.
Señalan que la importancia de dicho fósil no es solo cronológica, «sino que el resto recuperado hará posible determinar cómo era la cara de estos individuos y conocer el origen de la cara nuestra especie».
Más descubrimientos
Otros restos recuperados en esta campaña es, por un lado, un diente humano de Neandertal encontrado en el yacimiento de Galería de Estatuas Interior; y, por el otro, un ‘no resto’, ya que tan solo es ADN rescatado directamente de los sedimentos de las cuevas, donde cocinaban, dormían, orinaban… En definitiva, donde vivían. De hecho, en abril de este año aparecía una publicación en la revista ‘Science‘ en el que explicaban cómo extraían el material genético, sin necesidad de huesos, del suelo de dos cuevas de los montes Altai en Siberia (Denisova y Chagyrscaya), y, precisamente, de la Galería de las Estatuas de la Cueva Mayor, en Atapuerca.
320 investigadores en total
Durante la campaña de 2022 han participado alrededor de 320 investigadores, que han intervenido en la excavación de los yacimientos de la Sima del Elefante, Galería, Gran Dolina, Cueva Fantasma, ─todos ellos ubicados en la Trinchera del Ferrocarril─; en la Cueva del Mirador; en Cueva Mayor (yacimientos de Portalón, Sima de los Huesos y Galería de las Estatuas interior y exterior) y en el asentamiento al aire libre de Valdeprovedo.
