Mediante una serie de datos obtenidos por el Telescopio Espacial Cheops, de la Agencia Espacial Europea (ESA), científicos de la NASA han descubierto un explotaneta ovalado, forma provocada por el efecto de las mareas: el WASP-103b. Hasta el momento, se sostenía que los planetas sólo podrían tener forma esférica, pero el reciente hallazgo ha desplazado tal teoría.
En la investigación, publicada en Astronomy and Astrophysics, los científicos han desarrollado datos más que útiles sobre su composición, que incluso podrían ayudar a entender su origen. Actualmente, los expertos aseguran que la atracción gravitatoria, también conocida como “fuerza de marea”, deforma al exoplaneta hallado y, en vez tener forma esférica, parece un balón de rugby.