Estación Espacial Internacional quiere convertir el metal en vidrio

Cuando hablamos de metal y vidrio podría decirse que son materiales opuestos, uno es opaco y resistente, mientras que el otro es transparente y frágil. Lo curioso es que, bajo las condiciones adecuadas, el metal se puede convertir en vidrio, pero uno de características especiales, opaco, durable y resistente a la corrosión y los rayones.

Se trata de un material tan versátil que puede usarse en fundas de celulares, engranajes sin lubricante para los vehículos usados para la exploración lunar y hasta en transformadores eléctricos.

Esto ha despertado el interés de investigadores de la Estación Espacial Internacional, quienes adelantan desde la División de Investigación y Aplicaciones de Ciencias Físicas y Vida Espacial (SLPSRA) de la Nasa experimentos que han revelado nuevos aspectos sobre la formación de vidrio metálico.

Las investigaciones actuales se centran en determinar qué metales forman el mejor vidrio y cómo se puede emplear. Los tres metales más utilizados son el circonio, el paladio y el hierro, pero se trata de un campo en el que aun abundan preguntas como a qué temperatura ocurre la transformación, cuáles serán las propiedades del vidrio y para qué se podría usar.

La experimentación se lleva a cabo en la EEI debido a la microgravedad hace posible medir las cosas con mucha más precisión de lo que puede hacerse en la Tierra, además de exponer los materiales a condiciones que solo son posibles en el espacio.

Para continuar con esta investigación, que se adelanta como una colaboración entre la NASA y Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (Jaxa), fueron enviados nuevos materiales a bordo de la misión de reabastecimiento que lanzó Space X esta semana.