Hondurasensumanos Noticias Las noticias positivas que nos hacen crecer!
Tegucigalpa,Honduras miércoles 10 febrero 2021
“Los pobres son muchos y por eso es imposible olvidarlos”, así lo expresó el poeta Roberto Sosa, en su poema “Los Pobres”. Y como olvidarlos si cada día desde la madrugada y tarde de la noche recorren las calles cargando sus penas, amarguras y tristezas, para sobrevivir, tal la cruda realidad de los “pepenadores” en las calles de Danlí, el caso de la señora María Elena Valladares.
Originaria de Yuscarán, Valladares dice que a los tres meses de nacida sus padres la trajeron a Danli. Es dura la vida señor, desde las 3:00 de la madrugada inicio mi tarea para recoger botellas, antes que otros lo hagan; es una lucha entre pobres y miserables, cada quien buscando entre la basura algo que sea útil”, exclama, mientras hurga entre las bolsas de plástico, que más tarde se llevarán los recolectores de la municipalidad al botadero, ubicado al norte de la ciudad.
María Elena, es de la tercera edad, no sabe cuántos años tiene, lleva mascarilla para protegerse del COVID-19, igual lo hacen algunos de sus compañeros de infortunio, mientras otros la llevan de corbata dizque para estar seguros. Ella no recuerda cuándo la compró o si una mano caritativa se la regaló, es la misma que viene usando por largo tiempo, confiando más en Dios, porque el tapaboca que lleva puesto está más contaminado que la misma basura que revuelve, señalaron observadores.
Después de la breve entrevista siguió su camino, cargando el costal en busca de otro bulto de basura y continuar con su penosa vida, pero señala: “gracias por preguntar quién soy, a nosotros los pobres en este ingrato oficio nos ven como la misma basura que revolvemos y a mucha gente le molesta, porque dicen que les dejamos la basura regada”.
Fuente: La Tribuna
