Continúan con reforestación en zona de reserva de El Merendón

San Pedro Sula, Honduras. 25.09.2019

El alcalde Armando Calidonio junto a los equipos que realizan la actividad de reforestación en la zona de reserva de El Merendón, con la actividad garantizan el vital líquido.  /Las plantas reciben un buen tratamiento y cuidado, después de ser trasplantadas se les da continuidad para conservarlas y lograr el objetivo de reforestar la zona.

ESTRATEGIA PARA GARANTIZAR EL AGUA A LOS HABITANTES DE LA ZONA

La protección del tema hídrico de San Pedro Sula es una prioridad para la alcaldía sampedrana que a lo largo de la administración en este periodo han trazado la ruta a seguir para garantizar el agua a los vecinos y preservar el ambiente, a través de la readecuación del Plan de Manejo de la Zona de Reserva, cuyo enfoque es transversal al Plan Maestro de Desarrollo Municipal (PMDM).

“Se trata de un plan bien pensado y llevado a cabo, en cada comunidad de esa sierra, donde el tema de reforestación, así como un sin número de programas y actividades desde ya se están implementando para proteger el recurso hídrico”, recalcó el alcalde Calidonio, tras agregar que “a los vecinos que viven en El Merendón lo que estamos ofreciéndoles son soluciones integrales centradas en el ser humano, dando respuesta a las necesidades de ellos y al mismo tiempo que estos nos ayuden a conservar el ambiente en esa zona”.

En ese sentido, el jefe edilicio explicó que se tratar de introducción de apicultura, certificado de fincas de café, asistencias a los horticultores para la conservación de suelos.

“El Plan de manejo es un compendio de todas las actividades y programas que se implementan para la protección del recurso hídrico de la Zona de Reserva en El Merendón”.

El funcionario dijo además que a lo anterior se le agrega la educación ambiental para los niños en la escuela de El Merendón que a la fecha suman más de 11 mil alumnos los beneficiados con 450 capacitaciones en temas de preservación del ambiente.

Así también la orientación en el manejo integrado de plagas y enfermedades para reducir el uso de agroquímicos, es reforestación, además de todo lo relacionado con la prevención de incendios forestales y controles, como ejemplo “solo este año en noviembre empezaremos a hacer rondas corta fuego en 88 kilómetros, previniendo así que el otro año con ocho meses de sequía pudieran haber un mayor número de  incendios forestales, tenemos que proteger el bosque si queremos garantizar el recurso hídrico”.

Recordó que San Pedro Sula cuenta con tres cuencas, nueve sub cuencas río Manchaguala, río Naco, río El Palmar, río de Piedras, río Santa Ana, río Zapotal-Armenta, río Chachaguala, río Mogote y río Frío y 80 micro cuencas.

Recalcó que el Plan de manejo es el instrumento técnico, legal y operativo que establece los objetivos de gestión, incluyendo la programación de inversiones necesarias para las actividades de protección, conservación, restauración, aprovechamiento a fin de lograr la sostenibilidad del bosque de acuerdo a sus funciones económicas, sociales y ambientales.

Al respecto Cristy Raudales, gerente Municipal de Ambiente, precisó que los planes se centran en lograr la preservación y conservación de 4 ecosistemas y especies de interés social identificados durante el proceso de diagnóstico, como el bosque de pino, bosque nublado, el sistema hidrológico y especies claves que existen en la cordillera como el jaguar, venado cola blanca y chancho de monte.

El plan tiene dos objetivos bien claros, indicó Raudales, tras detallar que son la protección del recurso hídrico para garantizar el desarrollo económico de la ciudad y lograr el equilibrio en el uso y servicios que el bosque presta.

Citó además que anualmente la Municipalidad de San Pedro Sula, a través de 8 viveros municipales, 6 de los cuales están ubicados en comunidades como Tomalá, El Gallito y Buenos Aires de El Merendón, produce un promedio de 250 mil plantas.

También destacó que se recuperaron 253.88 hectáreas de bosque a través de diversas jornadas de reforestación en las que participaron habitantes, estudiantes y colaboradores de empresas privadas, voluntarios de organizaciones y otras asociaciones e iglesias.

Además, con el apoyo de los Amigos Municipales Forestales, se brindó protección a 90.97 hectáreas de bosque regenerados naturalmente, trabajando en la prevención de incendios forestales.

Fuente: Elpais.hn