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Descartan enfermedades en hato ganadero de la industria

Tegucigalpa, Honduras 15 septiembre 2019

La prevalencia de enfermedades como la brucelosis y la tuberculosis en los hatos ganaderos que proveen leche a la industria láctea hondurea, es menor a cero, afirmó el viernes una fuente del sector en base a datos de un programa de trazabilidad implementado desde este año.

El proyecto abarcó a alrededor de 400 haciendas diseminadas en los departamentos productores de leche, explicó el presidente de la Asociación Hondureña de Procesadores de Leche (Ahproleche), Edgardo Leiva.

“Desde el año pasado iniciamos un proceso de poner en control a todas las fincas que proveen de leche a la industria y estamos contentos, porque al cierre de este año la prevalencia es muy baja, es de 0.006 por ciento”.

Los resultados indican que los productores de leche han asumido con responsabilidad este proyecto y mantienen las unidades productivas en condiciones idóneas de explotación ganadera, dijo. Leiva agregó que en base a esta experiencia, continuarán con este proyecto de “Declaratoria de Fincas Libres de Bruscelosis y Tuberculosis Bovina”, de ahora en adelante.

Bajo estas condiciones de producción libre de enfermedades, comentó que se abren más puertas a la industria en los mercados del exterior, porque “el producto hondureño garantiza al que lo consume, que está libre de estas enfermedades y alejamos toda especulación que ha habido, de algunos sectores, que decían que la enfermedad en Honduras era de alta prevalencia”, contrastó.

El monitoreo abarcó a más de 225 mil reses mediante ocho brigadas que se desplegaron a las zonas de producción y se realiza conjuntamente con el Servicio Nacional de Inocuidad y Salud Animal (Senasa) de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG).

La fuente especificó que el programa de trazabilidad solo abarca los hatos ganaderos que proveen leche a la industria o procesadores de alimentos lácteos, no así, el resto del ganado o el sector informal que procesa quesos y mantequillas para el consumo local y que se ofrece en los mercados populares.

Se calcula que el hato nacional ronda 1.6 millones de cabezas de ganado, pero dijo que la “idea es incorporar al sector artesanal para que ellos también tomen conciencia y sean admisibles en los mercados”.

El proyecto de seguimiento a estas enfermedades es parte de un programa sanitario que durará cinco años a un costo cercano a 25 millones de lempiras aportados por la industria láctea del país, comentó Leiva. 

Fuente:  La Tribuna

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