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Hondureñismos ¿cuáles usa?

Tegucigalpa, Honduras martes 13 agosto 2019

Una experta dice que “si se habla de países, Honduras es a nivel latinoamericano el que más vocablos propios ofrece, seguido por México”

Hola amables lectores adonde se encuentren. Agradecidos por sus reacciones a nuestros reportajes. Muchos nos ayudan, con sus peticiones, a escribir sobre temas que les interesa -quizá- a la mayoría.

Después de otra semana llena de violencia, sangre, zafarranchos, escándalos, vamos un tanto al relax de fin de semana.

Más saludable para el alma y el espíritu que -lamentablemente- nos contaminan.

DICHOS

Recuerdos. Como estaba por aquí años atrás. Pero hoy siempre se sigue diciendo: Cachimbear, catrín, chabacán, chance, chepa, china.

Como hemos estado inmersos en el deporte, con esto de los Juegos Panamericanos. ¿Alguna vez usted fue a las “Olimpiadas”?

Al utilizar esta frase, sin sudar una tan sola gota en competencia, en un pasado, en los colegios lo que se daba a entender es que, saliendo mal en los exámenes regulares, se tenía que ir a período complementario. A “recuperación” en enero. Este hondureñismo ya se perdió.

Otra. En una carta dirigida a sus familiares, Alfredo, quien después de irse “mojado” a Estados Unidos y con mucha suerte logrado llegar a su destino, a tan solo unas semanas describe que está “amurriñado”.

Ello denotaba tristeza, soledad, en estado depresivo porque le hacía falta su familia y amigos.

En la contestación, su madre le aconseja que no se “amusepe”, (no se ponga decaído) que poco a poco se irá adaptando. Son parte de una infinidad de hondureñismos, muchos que han sido ya aceptados por la Real Academia Española (RAE.)

En los bares. Las veladas con hondureñismos se hacen más intensas. Goma, cutear, paja, penco, pijín, así llevátela, mara, cuero, cumbo, cheto, chepo, arrinconada, clavo, cuchumbo, chotear, potra, maje, maleado, chibola…

MÁS

Allá por los años setentas, había aquí un exitoso programa joco serio que se transmitía a través de HRN llamado “La escuelita alegre”.

El escenario era un aula de clase imaginaria en donde el profesor (Mario Alemán) regañaba constantemente a sus alumnos por sus infantiles incoherencias al no dar las respuestas correctas a sus preguntas sobre temas generales.

Los pupilos eran inquietos y juguetones a quienes castigaba con una regla llamándolos “desguabilados”. La frase se hizo tan popular como el mismo programa. Tanto que llegó a ser utilizada por el pueblo, pueblo.

Hoy “desguabilado” está ya aceptado por la RAE y es utilizada para dar a entender a alguien “inquieto, travieso, molestón o desobediente”. También se utiliza al “mal vestido”.

En aquellos años los militares eran temidos por la juventud a raíz que los reclutaba en las calles o lugares públicos, conminándolos a ejercer el obligatorio -en ese entonces- servicio militar.

Molestos, los llamaron “chiri”. “¡Ahí viene la chiri corramos!”, era frecuente escuchar. El servicio militar obligatorio fue abolido, no así la frase “chiri” o “chafarote”, identificándolos hasta estos días. Y aceptado por la RAE.

ALTISONANTES

Ancestros. Se dice que nuestros abuelos no tenían tanta “jerga” como las últimas generaciones. ¿Paja? Tendrían otras (¡!).

Ahora en la RAE se encuentran definiciones de plantas como bijao, caulote, chichi mora. Aquí se acuñó la frase que ya es popular: “A ese cipote no le dieron chichi mora cuando estaba chiquito”. Refiriéndose alguien rebelde y llorón.

Otros. Chichipate. Utilizado también en la jerga popular al identificar a alguien que toma mucho licor.

En la DRAE (Diccionario de la Real Academia Española) también se pueden encontrar palabras que tienen marca de altisonantes pero son aceptadas. Ejemplos: vergueada, vergón, vergueador, vergueado, jodedera, huevonada, huevonear, hueviar, huevera, huevón, huevonada.

Por otra parte, es común escuchar a alguien decir alguien es su “alero”. Incluso -una vez en el pasado- esta frase hasta fue utilizada para darle vida a un movimiento político de un aspirante presidencial. “Amigos de Leónidas Rosa” (Bautista).

En todas partes. No solo en Tegucigalpa, en casi todo el país se usan los hondureñismos.

Otras: Animalero, arrecho, babosada, chambear, deschambado, cambalache, guirro, desburrungarse, chafarote, cheto, chibola, cuchumbo, cuero, cutiar, cumbo, pijiniar…

El segmento juvenil. A esa chabala la tengo apantallada”. Ella: “Ese chavo me gusta”. “Andás pintoso”. “Mañana nos reunimos con la chavizada”.

Entre los estudiantes es común oír las palabras “chepe”, “chepear”, “yuca” (cuando un profesor es estricto). Es de hacer notar que se aceptaron: “marero” y “mara”. Que tiraron al olvido las palabras gavilla, palomilla o pacotilla, referente a grupo de amigos o amigas como se entendía décadas atrás.

Y por hoy hasta aquí mis amables lectores. ¿Usted tiene más hondureñismos? Seguiremos ¡porque ahorita me está esperando “la mara”…!

Hemos dejado otra HUELLA imborrable en el pedregoso camino de un ya largo trajinar.

Artista nacional
FALLECE MARCO ANTONIO MONTENEGRO

Marco Antonio Montenegro. Fallecido recientemente (QEPD) ). Aquí (centro) recibe un reconocimiento de la Corporación Municipal de Siguatepeque. Con él, “Carlitos” Ortiz. presidente de la APH.

Otro valor nacional -que en vida no se le reconocieron sus méritos como se merecía- se nos fue. Marco Antonio Montenegro. Polifacético. Periodista, escritor, actor, libretista, humorista y locutor. En todas estas ramas destacó.

Sus últimos años, hizo de Siguatepeque, Comayagua, su segunda casa ya que nació en Tegucigalpa. Inició sus pasos en los medios en Radio La Cariñosa (hoy La Voz de Suyapa) en San Pedro Sula.

Posteriormente se incorporó a Radio Centro y HRN. Fundador de varios programas de radio y TV. Integrante del “Teatro Merceditas Agurcia”, de “La escuelita alegre”. Fue del elenco de dos películas: “La pasión de Cristo” en donde interpretó el papel de Herodes y “El Plebeyo”.

Escribió y realizó la radionovela “Eres Mi Sueño”. Sub y posteriormente director de Radio Nacional de Honduras.

Su bien timbrada voz le permitió desarrollarse también como cantante. Representó a Honduras con la canción “El Niño” en el Segundo Festival Internacional de la Canción, el mismo en donde se dio a conocer José José de México con “El Triste”.

Grabó varios temas entre ellos “La doble canción” y “canciones”. Su actividad prolífera le permitió escribir varios libros, entre ellos “Tempo de reir” y “Noti-enojes” que tuvieron buena acogida.

Este último basado en el exitoso programa del mismo nombre que tuvo en HRN en donde le hizo mancuerna otro ingenioso, Randolfo Rodríguez. De este mismo corte de programas crítico-humorísticos fundó “El Zancudo”.

Cuando la parca le llega, Marco Antonio tenía 82 años. Un fulminante paro cardíaco se llevó al hombre siempre sonriente, simpático, con el chiste brotado al instante y creativo.

Tuve el gusto de conocerlo y compartir en sus actividades artísticas ya que nos ligaban los medios de comunicación. Era hermano del también polifacético Jorge Montenegro quien nos dejó hace poco. Su hijo, Allan Montenegro siguió su huella de periodista.

Los dos ya hacen su “peña artística” allá en lo infinito. Junto a Guillermo Anderson, Carlos Arturo Rubio, “Toto” Pérez, Leonzo López Fiallos, Salvador Lara, José León Valladares, “Toño” Torres, Julio López Fuentes, Abelardo Avendaño, Herman Allan Padgett, Ricardo Redondo Licona, mi padre Arturo Matute y muchos más que dejaron HUELLA y bien sembrado el nombre de Honduras en escenarios internacionales.

Aunque aquí… poco o nadie valora sus dones artísticos y apoyan en vida. Más aún, cuando les llega la hora de partir hacia el reino de Nuestro Señor.

Que en paz descanse el amigo Marco Antonio. Resignación cristiana a sus familiares.

HOY NOS BAÑAMOS EN ORO

Sacando aquello que se había perdido, “la garra catracha”, nuestra representación futbolística en los Juegos Panamericanos en Perú, nos tienen hoy a las puertas de alcanzar una medalla de oro.

Ya aseguramos la de plata. Después de dejar en el paso a potencias futbolísticas. Los nuestros se la juegan hoy frente a Argentina en la gran final de este torneo que ya está en sus últimas.

Otra satisfacción. Kevin Mejía nos trae la medalla de bronce. En la disciplina de lucha grecoromana en la categoría de 97 kilogramos, después de enfrentarse a grandes atletas de Estados Unidos, Colombia y Canadá.

Para que vean estos mediocres politiqueros de patio, empecinados con sus funestas acciones, en mostrar como cara fea, esta Honduras en el extranjero. Por otro lado, hay catrachitos que hacen todo lo contrario. Ponen en alto el nombre de su patria allende fronteras. Y lo hacen limpiamente.

Basados en la práctica sana del deporte y no de las artimañas, triquiñuelas, tráfico de droga, de influencias, de las peleas infecundas en un zoológico otrora llamado Congreso Nacional. Con sus raras excepciones.

Ya ven. Aquí otro ejemplo que aquí podemos hacer de Honduras una patria mejor. Que nos sintamos orgullosos de ser hondureños. Que figure en lo alto del escenario mundial y no sea conocida solo por escándalos, violencia y crisis, alimentada por mal nacidos hondureños.

¡Arriba muchachos atletas! ¡Abajo politiqueros mediocres!

Fuente: La Tribuna

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