Las Islas del Cisne forman un archipiélago con un área aproximada de 8 kilómetros cuadrados de superficie.
Las islas cuyo nombre se debe a un pirata de apellido Swan, (Cisne), no tienen un historial de comunidades humanas permanentes, salvo los años que fue utilizada como centro de espionaje e investigación por parte de los Estados Unidos en la década de los 60, y posteriormente desde que Honduras ejerce su soberanía sobre las islas, tiempo desde el cual existe un pequeño destacamento naval que las protege.
Es una de las islas mejor conservadas de Honduras, auténtica joya difícil de llegar, pero fascinante al conocer.
Fuente:wwwhondudiario.com