La Libertad,Comayagua. 08.10.2018
Un cerro que nunca deja de crecer o uno que tiene tornillos fosilizados… ¿Mito o realidad?, quizá nunca lo sabremos, pero sí conocemos que existe un lugar en Honduras que es una joya arqueológica.
En medio de varias montañas y con cuatro iglesias en su alrededor -algo inusual para un lugar de al menos 30 mil habitantes- se encuentra el municipio de La Libertad, en Comayagua, que pasó a ser ciudad en 1917.
A solo cinco minutos del parque central se encuentra el denominado cerro Los Tornillos, donde a simple vista no se observan las que parecen piedras fosilizadas.
Los pobladores cuentan que las piedras, que realmente son caracoles, son producto del diluvio universal -que relata La Biblia- y que inundó Comayagua, dejando las rocas en forma de espiral sobre el populoso cerro.
Lo curioso es que al abrir las piedras fosilizadas tienen olor a petróleo, pese a que son como de tierra blanca.
Fuente:wwwelheraldo.hn