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10.09.2018
Los jóvenes hondureños Eduardo Rivera, Francisco Villeda, Ulises Obando y Paulo Matute ganaron medallas de bronce durante las Olimpiadas de Matemáticas de Centroamérica y del Caribe desarrolladas en el Memorial José Martí, La Habana, Cuba.
Los muchachos fueron recibidos en el aeropuerto de Toncontín por sus familiares, amigos, tutores y personal de la Secretaría de Educación. Portaban las tres medallas de bronce y una mención honorífica, que los ubica en un buen lugar frente a países como Puerto Rico, Colombia, El Salvador, México y Cuba que suelen acumular los primeros lugares, con oro y plata.
El equipo fue dirigido por Leonel Obando, como tutor, y José Arrazola, jefe de delegación, pero previo a ese encuentro otras personas fortalecieron las capacidades de los concursantes en el Programa Olimpiadas de Matemáticas como proyecto de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM).
En Cuba las matemáticas juegan un papel esencial desde la enseñanza en prebásica hasta de postgrados y especializaciones, por ello la sede del evento.
El profesor del Departamento de Matemáticas de la UPNFM y coordinador del proyecto, Mariano Solórzano, dijo que el trabajo previo a la representación fue arduo. En el proceso se identifican a los alumnos de institutos aptos para este tipo de competencias internacionales.
“Cada año estamos invitados a participar en las olimpiadas de matemáticas de Centroamérica y El Caribe, a las de Iberoamérica y la Olimpiada Mundial, participan desde niños hasta jóvenes de secundaria. Este año era de cuatro alumnos por país, fueron 12 naciones y hemos tenido un gran logro que son las tres medallas de bronce y la mención de honor”, expresó.
Detectamos talentos a nivel nacional y los preparamos en la Universidad Pedagógica, tenemos un proceso continuo hasta llegar a la etapa de la selección de los concursantes.
Ese proyecto se ha desarrollado con un presupuesto de un millón de lempiras, solo un concurso lleva, a veces, tres años de entrenamiento.
Cada problema matemático vale siete puntos y los concursantes disponen de cuatro horas y 30 minutos para resolverlo. Este fue el primer ejercicio para los hondureños.
Entre clases diarias, viajes de los concursantes y compras de boletos se erogan más de 500 mil lempiras, por lo que el apoyo institucional ha sido muy valioso además del aporte de la Secretaría de Educación, agradeció la fuente académica.
Para Margarita Mcpherson, presidenta del Comité Organizador, las matemáticas desempeñan un rol esencial en el desarrollo intelectual de los jóvenes, por tanto, el concurso es auspiciado por la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura, (OEI).
“Sabemos que llegar a este certamen significa un profundo esfuerzo de los estudiantes y de los profesores que dedican largas jornadas para profundizar en los alumnos los conocimientos y que sientan motivación, curiosidad, interés y amor por esta ciencia”.
El concurso propició el encuentro entre estudiantes y profesores de la región, además de “alimentar la inteligencia, talento y hermandad como máxima expresión de las ideas de nuestro héroe Nacional, José Martí y en nuestro país existe un movimiento masivo para el interés por el desarrollo y motivación de la Matemática”, agregó. (SA)
