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Tegucigalpa.27.11.2017
Durante las elecciones generales celebradas ayer, se disparó la venta de diferentes productos, entre estos, banderas, comidas y bebidas típicas que fueron consumidas por miles de capitalinos que asistieron masivamente a los centros de votación de Francisco Morazán.
Desde tempranas horas, la ciudadanía se trasladó a las urnas ubicadas en escuelas y colegios de las diferentes colonias, para dar inicio a una larga jornada democrática que mantuvo a la población hondureña concentrada en ciertos puntos, por lo que los comerciantes aprovecharon para vender sus productosen los asistidos lugares.
BANDERAS Y PULSERAS
Las banderas de los diferentes partidos políticos fueron sumamente cotizadas por los apasionados electores. Sin importar que los precios oscilaban entre 80 a 140 lempiras, dependiendo del tamaño, los votantes adquirieron las banderolas para agitarlas antes de entrar o salir a los diferentes centros de votación.
También hubo puestos con pulseras alusivas a los partidos políticos y la gente pudo obtener las interesantes artesanías a 20 lempiras.
Algunos astutos negociantes ofrecieron a los compradores una variedad de productos para obtener la atención de los miles de ciudadanos que se trasladaron a la mayoría de escuelas de Tegucigalpa y Comayagüela, y a las aldeas del Distrito Central, para elegir a las autoridades del gobierno del país.
El flan fue ofrecido a 20 lempiras por los alrededores de las escuelas y colegios.
NACATAMALES Y BALEADAS
En algunas populosas colonias de la capital como la John F. Kennedy y el Hato de Enmedio, además de la 21 de Octubre, entre otras, los vendedores prepararon exquisitos bocadillos, como “tajaditas”, panes con frijoles, baleadas y nacatamales, a diferentes precios, para que la gama de comidas típicas fuera más amplia en sabor y valor.
En las afueras de escuelas y colegios se encontraron puestos con baleadas y pupusas, desde 10 a 20 lempiras, mientras que en los nacatamales los precios no fueron tan flexibles porque no bajaron de 22 lempiras.
En el transcurso de la fiesta democrática también vendieron curiosamente zacate de limón a 10 lempiras, ubicado en medio de las banderas, y no pudo faltar el sabor de la horchata y el “cafecito” que se consumió principalmente a eso de las 6:00 de la mañana.
