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El Gobierno de la República a través de la Secretaría de Desarrollo e Inclusión Social (SEDIS) en coordinación con el Programa Mundial de Alimentación (PMA) ha ampliado su Programa Alimentación Escolar (PAES), anteriormente conocido como “Merienda Escolar”, también a La Mosquitia, donde uno de los logros es que los productores locales abastecen con granos básicos y vegetales.
La Mosquitia, ubicada en el Departamento de Gracias a Dios, ha figurado en el pasado como una de las regiones más olvidadas de Honduras. Por muchas décadas ha sido ignorada por los distintos gobiernos políticos, y aunque en el último año se le está dando mucho empuje, esta región carece de muchas necesidades básicas. Una de ellas es la nutrición de los niños en las escuelas públicas.
La SEDIS firmó un conv
enio de colaboración interinstitucional con MiAmbiente y el Instituto de Conservación Forestal (ICF) con el propósito de implementar una estrategia de desarrollo integral y sostenible para que comunidades campesinas e indígenas se integren de forma articulada y progresiva a la plataforma de Vida Mejor que promueve el gobierno de Honduras.
Con asesoría técnica y capacitaciones a productores de las comunidades de Suhí, Pranza y Mabita en La Mosquitia, el Programa Adaptación al Cambio Climático en el Sector Forestal (CliFor), financiado por la Unión Europea (UE) el Gobierno Alemán (BMZ) y el Estado de Honduras y ejecutado por el Instituto de Conservación Forestal (ICF), ha contribuido fuertemente para que productores agrícolas de estas comunidades ya estén en condiciones de suministrar productos locales al PAES por medio de convenios de compra-venta con el PMA de las Naciones Unidas, que apoya esta iniciativa no solo en la Mosquitia, sino también en otras regiones de Honduras.
“Firmamos convenios con productores locales de la Mosquitia para que ellos suministren alimentos para las escuelas de sus propias comunidades. Esta es una nueva estrategia que está impulsando el gobierno central para mejorar la calidad de alimentos que entregamos y para dar oportunidades a los productores locales. Para que todo funcione se requiere de un buen engranaje.
Los productores en las comunidades necesitan que alguien los apoye en darles la asistencia técnica necesaria para garantizar una buena calidad de alimentos. En este sector de Suhí, Pranza y Mabita el ICF, el Programa CliFor ha tomado este papel importante y ha logrado que los campesinos estén en condiciones de suministrar comestibles de calidad”, comenta José Lino Pacheco, Coordinador del Programa de Alimentación Escolar en la SEDIS.
Una de las organizaciones de productores en la zona y firmantes del reciente convenio es Mairen Indian Miskitu Asla Takanka (MIMAT), que significa Asociación de Mujeres Indígenas Misquitas. Generalmente excluidos del mercado laboral y productivo, este grupo de mujeres ha mostrado su capacidad de facilitar y generar alimentos no solamente para su propio sustento, sino también para abastecer granos básicos y alimentos frescos para el Programa Alimentación Escolar como relata su presidenta Cendela López: “No es fácil la firma de un convenio de esta naturaleza. Con esto desarrollamos nuestras comunidades y apoyamos aún más a las mujeres. Mostramos que las mujeres misquitas no son solamente para tener sus bebes y cuidar a sus esposos, sino para generar ingresos y beneficios.”
Ha habido un cambio bastante positivo en los últimos años. Anteriormente Honduras compró a través del PMA de la Naciones Unidas granos básicos en el extranjero, pero poco a poco las compras se han hecho en este mismo país. Hoy en día, casi el 100% de la adquisición de alimentos se realiza en Honduras. ”
El gobierno hondureño ha impulsado de una manera muy fuerte la compra de alimentos a productores locales. De esta manera se fortalece la economía en las comunidades. Y en este año, por primera vez, se adquiere el aceite vegetal en el país para la alimentación escolar”, expresa la Directora del PMA en Honduras, Pasqualina di Sirio, con mucho orgullo.
La coordinación eficiente interinstitucional entre la SEDIS, MiAmbiente e ICF, a través del Programa CliFor, y el amplio involucramiento de organizaciones campesinas y forestales demuestran el gran potencial que se puede generar para lograr un desarrollo integral que beneficia directamente a los pobladores. La región de La Mosquitia, con su enorme potencial cultural y económico, merece un futuro más próspero y las mujeres de la MIMAT y los productores locales son un ejemplo de cómo hacerlo.
Fuente: Hondudiario.com
