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San Pedro Sula, 04.01.2017
Migrantes retornados, madres solteras y mujeres víctimas de la violencia, forman parte de las 150 familias de escasos recursos económicos que emprendieron su propio negocio, a través del Programa de Apoyo a la Microempresa (Pama) que impulsa la municipalidad de San Pedro Sula.
El director de esa iniciativa, Salomón Kattán, explicó que una de las alianzas es con el gobierno central, a través del proyecto Banca Solidaria, con el cual se gestiona créditos para las personas interesadas en formar su propio negocio.
Refirió que previamente se realiza un estudio socioeconómico con capacitación en temas financieros y de emprendedurismo, para finalmente gestionar fondos para que puedan tener acceso a un crédito destinado a formar su negocio.
Manifestó que también trabajaron con un grupo de 200 familias migrantes retornadas, a quienes capacitaron para que formaran una empresa, de las cuales 22 la establecieron y están funcionando bien.
Añadió que además lograron que 27 microempresarios legalizaran sus negocios, ya que recibieron la escritura de comerciantes individuales, con la cual podrán obtener préstamos con la banca nacional.
Añadió que la mayoría de los negocios se creó en las áreas de zapatería, salones de belleza, pulperías, tecnología, manualidades y artesanía, entre otros.
“Este es un trabajo en conjunto con la Oficina Municipal de la Mujer, porque las personas que son capacitadas en los diferentes oficios vienen al Pama para un estudio socioeconómico y formarse en el tema de negocio y contabilidad”, puntualizó.
Para esas iniciativas, cuentan con el apoyo de la Asociación de Municipios de Honduras (Amhon), Comisión de Acción Social Menonitas (CASM) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Fuente: latribuna.hn
