07.10.2025
Ubicada en el corazón de Honduras, Comayagua es una joya colonial que cautiva a todo viajero con su arquitectura, cultura y tradición. Fundada en 1537, esta ciudad fue la antigua capital del país y hoy se ha convertido en uno de los destinos turísticos más importantes por su mezcla perfecta entre historia, espiritualidad y belleza.
Caminar por las calles empedradas de Comayagua es como viajar en el tiempo. Sus casas de tejas rojas, balcones de madera y plazas llenas de vida evocan la época colonial española, mientras que sus imponentes iglesias conservan un legado religioso invaluable. Entre ellas destaca la Catedral de la Inmaculada Concepción, famosa por albergar uno de los relojes más antiguos del continente americano, construido en el siglo XII y que aún funciona con precisión sorprendente.
Otro punto imperdible es el Museo de Arte Religioso Colonial, donde se exhiben obras de arte sacro, esculturas y piezas que narran siglos de fe y tradición. Muy cerca, el Museo Regional de Arqueología ofrece una mirada fascinante al pasado precolombino de la región, con vestigios de la cultura Lenca y otras civilizaciones antiguas.
Comayagua también es conocida por su Semana Santa, una de las más solemnes y coloridas de Centroamérica. Durante esos días, la ciudad se cubre de alfombras de aserrín multicolor, elaboradas por los habitantes con diseños religiosos y florales que atraen a miles de visitantes nacionales y extranjeros.
Además de su patrimonio cultural, Comayagua ofrece experiencias naturales únicas. A pocos minutos del centro histórico se encuentran el Parque Nacional Montaña de Comayagua, ideal para los amantes del senderismo y la observación de aves, y las refrescantes Cascadas de Río Ulúa, un lugar perfecto para disfrutar de la naturaleza.
Con su mezcla de historia viva, arte colonial y tradiciones profundamente arraigadas, Comayagua se consolida como un destino imprescindible para quienes desean conocer la esencia de Honduras.
Diario Roatán