08.07.2025
El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), expresó hoy su preocupación por la no renovación del Estatus de Protección Temporal (TPS), por parte del gobierno de Estados Unidos para más de 55 mil hondureños amparados, en esa medida, desde 1999, lo que traerá como consecuencias advirtió, posibles deportaciones y la separación de familias.
La coordinadora de la Defensoría de Movilidad Humana del Conadeh, Elsy Reyes señaló que, una de las consecuencias directas es que se “abre la puerta” a las deportaciones de las personas amparadas en este beneficio, lo cual es preocupante porque quedan en las mismas condiciones que el resto de compatriotas que han estado siendo detenidos y separados, incluso de su familia, en los últimos meses.
Lo otro es que se quedan sin las garantías y la protección de derechos fundamentales en ese país, como el derecho al trabajo, a la salud, a la libre circulación, ya que no van a poder tener permiso para trabajar, tener acceso al seguro médico, ni poder optar a solicitar licencia de conducir, agregó.