Isleña Nellcie Bodden se gradúa en la Universidad de Columbia y se proyecta como líder en justicia social

30.05.2025

La isla de Roatán celebra con orgullo a Nellcie Nicole Pinnace Bodden, quien recientemente se graduó de la prestigiosa Universidad de Columbia en Nueva York, una de las instituciones académicas más reconocidas del mundo.

Pinnace Bodden obtuvo su título de Bachelor of Arts con doble especialización en Ciencias Políticas y Sociología, dentro de la ruta académica Pre-Law, orientada hacia estudios de Derecho. Su logro marca un paso firme hacia una carrera comprometida con la justicia social, la defensa de los derechos humanos y el liderazgo comunitario.

Nacida y criada en Roatán, Nellcie fue educada en la Church of God School, donde se destacó como estudiante ejemplar desde temprana edad. Su formación se cimentó en valores de respeto, esfuerzo y fe, pilares inculcados por su madre Darnell Bodden y su abuela Florence Mathis, quienes la acompañaron de cerca en su desarrollo académico y personal.

Una figura clave en su inspiración ha sido su tío, Brice Bodden, reconocido por su trabajo en favor de la igualdad y la justicia. Fue su ejemplo el que despertó en Nellcie el deseo de convertirse en una voz para los más necesitados.

Gracias a una beca completa, Nellcie ingresó a Columbia, donde no solo enfrentó los desafíos de un entorno académico de alto nivel, sino que también se mantuvo firme en su humildad y compromiso con sus raíces. «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece», es la frase bíblica que ha guiado su camino, según expresó.

Aunque ha vivido varios años fuera del país, su vínculo con Roatán sigue siendo profundo. Su sueño es regresar a la isla para contribuir con su comunidad, promoviendo oportunidades para las nuevas generaciones y utilizando su preparación para impulsar cambios positivos.

Nellcie Pinnace Bodden se ha convertido en un símbolo de lo que puede lograrse cuando el talento, la disciplina y la fe se unen. Su historia inspira a jóvenes hondureños a creer en sus capacidades y a soñar en grande, sin perder de vista sus raíces.