Para el 28 de noviembre de 1821 los efectivos militares habían sido diezmados y los partidarios de la Independencia pidieron una reunión de autoridades civiles, eclesiástica y militar en cabildo abierto, en presencia de una multitud.
Para el 28 de noviembre de 1821 los efectivos militares habían sido diezmados y los partidarios de la Independencia pidieron una reunión de autoridades civiles, eclesiástica y militar en cabildo abierto, en presencia de una multitud.