Personas privadas de libertad aprenden oficios y crean emprendimientos

TEGUCIGALPA. 09.09.2023

Aprovechando su tiempo y las oportunidades de formación que se brindan en cada centro penitenciario, las personas privadas de libertad le apuestan a sus talentos para emprender y generar ingresos.

Los primeros productos que fabrican los internos, ellos los venden y la ganancia la utilizan para seguir comprando material y que de esta manera inicie su proceso de emprendimiento, para que, al momento de recuperar su libertad, ya tengan una motivación para un efectivo y correcto cambio de vida.

Luego, los artículos elaborados por las personas privadas de libertad son entregados a sus familiares durante la visita de fin de semana y ellos los venden, obteniendo una ganancia para sus gastos y con el resto del dinero compran materiales para que su familiar continúe produciendo las manualidades que han aprendido a fabricar.

Los proyectos enfocados en la reeducación, rehabilitación y reinserción a la sociedad, se imparten de manera gratuita.

EDUCACIÓN FORMAL

Durante el tiempo de privación, las personas tienen la oportunidad de iniciar o continuar sus estudios a nivel de educación básica y media.

En lo que va del 2023 se ha establecido un programa de alfabetización y una vez finalizado el mismo, la persona está lista para comenzar con sus estudios escolares.

En todos los centros penitenciarios se cuenta con aulas para impartir clases y a través del Convenio de Colaboración Educativa con la Secretaría de Educación, se tienen acuerdos con centros educativos para que los certificados de estudios sean extendidos por los mismos y no por el centro penitenciario.

Asimismo, se cuenta con la asignación de docentes y la capacitación de los facilitadores educativos al impartirles el curso de metodologías en docencia.

Sumado a esto, la Secretaría de Educación apoya con la dotación de bolsas escolares conteniendo diferentes materiales educativos.

CURSOS DEL INFOP

De manera simultánea, los privados de libertad también pueden asistir a los cursos que se imparten con el apoyo del Instituto Nacional de Formación Profesional (Infop), que a nivel nacional ofrece una variedad de 270 cursos, según el rubro laboral de la zona en donde se ubica cada establecimiento penitenciario.

El Infop, a través de sus instructores, imparte cursos para promover el emprendurismo y fortalecer sus habilidades, entre ellos: administración de negocios, atención al cliente, relaciones interpersonales, contabilidad básica, habilidades humanas, inglés, computación, entre otros.

A un lado de la capacitación psicomotora, está la de generar las capacidades en trabajar distintos oficios, como: barbería, tapicería, electricidad, costura, belleza, cocina, repostería, elaboración de productos de limpieza, de velas o candelas orgánicas, y fabricación de piñatas, productos con material reciclable, entre otros.

DATOS
Previo al inicio de los cursos, que son de participación voluntaria, el personal del Consejo Técnico Interdisciplinario (CTI) hace una socialización con las personas privadas de libertad en donde se les indica que la educación formal (básica y media) como la no formal (cursos), son totalmente gratuitos, ya que el Instituto Nacional Penitenciario es el encargado de comprar los materiales según el listado de alumnos que facilita el instructor o docente.

VOTO DE CONFIANZA
LABORAN EN JARDÍN BOTÁNICO
Mediante gestiones realizadas por el Instituto Nacional Penitenciario (INP), un grupo de personas privadas de libertad que gozan del beneficio de preliberación, trabajan con la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (Serna) en la creación del primer jardín botánico de Honduras, también en la reforestación y creación de senderos en la represa El Coyolar, ubicada en Comayagua.

Estas personas, en su mayoría mujeres, madres solteras, han mostrado su agradecimiento por la oportunidad laboral generada y el apoyo brindado por la Serna, al confiarles un proyecto que marcará la historia del gobierno de la Presidenta Xiomara Castro.

Fuente: latribuna.hn