Roscosmos (agencia espacial rusa) anunció el envío de la nave espacial Soyuz MS-23 hacia la Estación Espacial Internacional (EEI, por sus siglas) para reemplazar a Soyuz MS-22 el próximo 20 de febrero, debido a que se detectaron fugas en su casco interior.
Yuri Borísov (director general de Roscosmos) declaró en una rueda de prensa que «la Comisión Estatal decidió efectuar el lanzamiento de la nave espacial Soyuz MS-23 el 20 de febrero de 2023 sin tripulación y con cargamento rumbo a la EEI», añadiendo que el vuelo sin tripulación permite adelantar el lanzamiento de la nave espacial.
La variante del vuelo con un solo astronauta requeriría efectuar cambios en la nave y aumentar la preparación del tripulante, por lo tanto, el lanzamiento se aplazaría varias semanas. Los tripulantes del segmento ruso de la EEI comunicaron al centro de control en tierra que un sensor no tenía presión en el sistema de refrigeración del casco de Soyuz, indicando una fuga que fue confirmada visualmente.
La fuga obligó a cancelar la caminata espacial en la que iban a participar Serguéi Prokopiev y Dmitri Petelin, además, los daños se produjeron en el casco del segmento de equipos y propulsores compuestos por el módulo de descenso y compartimento de trabajo y descanso.
Es importante mencionar que el pasado 25 de noviembre se tuvo que cancelar la caminata espacial de Prokofiev y Petelin por un inconveniente con una de las escafandras, además, en agosto, el cosmonauta ruso Oleg Artémiev regresó antes de lo previsto a la Estación Espacial Internacional a causa de unos problemas que tuvo con su escafandra durante una actividad extravehicular.
Fuente: 20minutos.es