LA LITERATURA HONDUREÑA VIVE UNA NUEVA ERA

Tegucigapa,Honduras viernes 04 marzo 2022

Cuatro grandes eventos a realizarse en distintas ciudades del país durante este año propiciarán que la literatura hondureña tenga un nuevo impulso en su cruzada contra su condición de casi invisibilidad de la que ha sido objeto durante mucho tiempo.

La Feria del Libro del Centro Cultural de España, en Tegucigalpa, a realizarse, como cada año, en abril, con la participación de editoriales, librerías y autores de todo el país; el Festival Internacional de Los Confines, que en su sexta edición tendrá lugar nuevamente en Gracias, con la participación de poetas y artistas de más de veinte países; la Feria del Libro de San Pedro Sula, que volverá en octubre, después del éxito de su primera edición el año pasado, con una gran convocatoria de editoriales y autores; y un nuevo evento, muy prometedor: un encuentro internacional de narradores en Copán, para noviembre, serán esas grandes citas para los amantes de la literatura.

De esta manera, los lectores en Honduras tendrán la oportunidad de conocer a los autores y de asistir como público a una gran cantidad de presentaciones de libros, lecturas y conferencias que serán parte del programa cultural de cada uno de esos eventos.

Salvador Madrid, director del Festival Los Confines y ahora también promotor del Festival de Copán, considera que estos eventos “de trascendencia cultural” son importantes para el país porque permiten el contacto entre escritores, lectores, gestores culturales en espacios que involucran a los miembros de toda la comunidad y no solo a quienes tienen un interés específico por la literatura.

MERCADO EDITORIAL

Durante la Feria del Libro de San Pedro Sula, en octubre del año pasado, un puñado de editoriales coincidieron con sus libros y sus autores en el Museo de Antropología e

Historia. Esas editoriales fueron Mimalapalabra, Efímera, Editorial Universitaria, Casasola, Sofos y La Hermandad de la Uva. Casi todas ellas, junto a algunas nuevas, integran una Asociación de Editoriales Hondureñas recién fundada, que tiene como principal objetivo ampliar la cobertura de su actividad editorial tanto en Honduras como en otros países de la región.

Javier Suazo, autor de varios libros, que son parte del catálogo de la editorial Casasola, opina que el país está teniendo una “efervescencia editorial” con una “profusión de empresas editoriales, de publicación de títulos y de la más variada cantidad de géneros y autores”, lo cual ha “refrescado el panorama de la literatura hondureña”.“La literatura en Honduras está entrando a una etapa distinta, que tiene que ver con el fenómeno del surgimiento, durante los últimos años, de una buena cantidad de editoriales que trabajan de manera organizada y permanente para configurar sus respectivos catálogos, lo que, obviamente, ha propiciado que los autores entren en una dinámica más profesional, tanto a nivel de la escritura de sus textos como de la promoción de sus libros, y que cada vez sea más necesaria la organización de ferias o encuentros literarios que le den el marco lógico a esa dinámica”, dice Giovanni Rodríguez, director de la editorial Mimalapalabra de San Pedro Sula.

Si bien los cuatro grandes eventos literarios citados al inicio de este artículo surgieron con iniciativas institucionales o independientes separadas durante los últimos años, la Asociación de Editoriales Hondureñas ha decidido establecer con ellos una especie de ruta anual para sus libros y sus autores, de manera que la producción literaria nacional circule por varias ciudades y entre distintos públicos.

Las editoriales asociadas buscan, además, llevar sus libros a otros países centroamericanos. Para esto han empezado a establecer contactos con las ferias internacionales del libro de Guatemala y Costa Rica, al tiempo que buscan un acercamiento con la Cámara Hondureña del Libro, ha informado Melissa Merlo, directora de la editorial Sofos, quien, además, considera que las antologías que se publican en diferentes países constituyen “otro espacio de proyección internacional”.

PREMIOS LITERARIOS

Otro eslabón importante en esa cadena de iniciativas literarias en el país lo constituyen los premios. A los de los Juegos Florales de Santa Rosa de Copán y San Marcos de Ocotepeque se les unió en los últimos años el de los Juegos Florales de Santa Bárbara, con compensaciones económicas que llegan hasta los 15 mil lempiras para los primeros lugares.

Más reciente y ya consolidado es el de poesía del Festival Internacional de Los Confines, que no tiene remuneración monetaria, pero que publica el libro ganador. Y los últimos premios en sumarse a esta oferta son el de literatura infantil “Rubén Berríos”, convocado por la Asociación Hondureña de Literatura Infantil y Juvenil y Casa de Morazán, que otorgará 22 mil lempiras en premios; y el de narrativa, para un libro de cuentos o novela, de la editorial Mimalapalabra, que ofrece al ganador un premio en metálico, la publicación del libro y una cantidad de ejemplares.

Juntas, todas esas iniciativas: producción editorial, ferias, encuentros y premios literarios, a las que esperan sumarse otras en Comayagua y Siguatepeque, que están en proceso de organización, constituyen una oferta cultural sin precedentes en Honduras para un solo año y permiten hablar de una nueva era en la literatura del país. “Honduras ha tenido buenos autores, pero tanto ellos como los lectores se habían mantenido siempre en sus rincones íntimos”, dice Salvador Madrid, pero a partir de ahora serán visibles y compartirán juntos la alegría por los libros en diferentes ciudades del país.

Fuente: La Tribuna