Tegucigalpa,Honduras jueves 02 diciembre 2021
La madre de Wilmer lloró y lo buscó por las calles cuando él trató de llegar a Estados Unidos, irregularmente y sin avisar, para conseguir empleo. Aunque la «migra» lo regresó, Wilmer lo volverá a intentar. A sus 18 años, no ve futuro en Honduras.
«Yo quiero irme otra vez, la tentación está, y eso no me lo quito de mi cabeza hasta que lo logre. Si me agarran una, dos, tres, cuatro, cinco veces lo voy a intentar, porque es mi sueño sacar adelante a mi familia», confiesa Wilmer Rodríguez.
En un país con más de la mitad de su población en pobreza, miles de hondureños creen que migrando a Estados Unidos pueden mejorar su situación.
En el camino están expuestos a la muerte, sobre todo a manos de los traficantes de personas («coyotes») y de extorsionadores.
Fuente: La Tribuna