Aunque las posibilidades de que golpee la Tierra son muy bajas, Bennu es uno de los dos asteroides conocidos más peligrosos de nuestro sistema solar, junto con otro asteroide llamado 1950 DA.
Según informa la NASA en su página web, usando la Red de Espacio Profundo de la NASA y modelos de computadora de última generación, los científicos han podido calcular las incertidumbres en la órbita de Bennu, determinando que su probabilidad de impacto total durante el año 2300 es de aproximadamente 1 entre 1.750, es decir un 0.057%. Los investigadores también han podido calcular que el 24 de Septiembre de 2182 es la fecha única más significativa en términos de impacto potencial, habrá una probabilidad de impacto de 1 entre 2.700 (o alrededor del 0,037%).
Antes, en el año 2135, el asteroide Bennu se acercará a la Tierra. Aunque el objeto no representará un peligro para nuestro planeta en ese momento, los científicos deben comprender la trayectoria exacta de Bennu durante ese encuentro para predecir cómo la gravedad de la Tierra alterará la trayectoria del asteroide alrededor del Sol y afectará al peligro de impacto a la Tierra.
La nave espacial de vigilancia OSIRIS-REx ha pasado más de dos años muy cerca del asteroide, recopilando información sobre su tamaño -tiene aproximadamente 500 metros de ancho-, forma, masa, y composición, mientras se monitorea su giro y trayectoria orbital. La nave espacial también recogió una muestra de roca y polvo de la superficie del asteroide, que entregará a la Tierra el 24 de Septiembre de 2023 para una mayor investigación científica.