16.01.24
La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) advirtió este miércoles sobre las posibles consecuencias del “huracán Trump” para Honduras, en referencia a las políticas migratorias del presidente estadounidense Donald Trump, quien ha amenazado con deportar a millones de inmigrantes indocumentados. Según la ASJ, el país podría enfrentar un aumento significativo en el número de deportados, con un estimado de 120,000 hondureños retornando durante el primer año de la administración de Trump.
Carlos Hernández, director ejecutivo de la ASJ, comparó la situación con la preparación de un país ante un fenómeno meteorológico, y afirmó que Honduras debería tener un plan claro frente a esta amenaza. Señaló que, a menos de una semana de la toma de posesión del segundo mandato de Trump, aún no se han anunciado estrategias por parte del gobierno de Xiomara Castro para mitigar el impacto de las deportaciones masivas y otras medidas migratorias.
Entre las medidas anunciadas por Trump se destaca la deportación de 11 millones de inmigrantes indocumentados, con una meta inicial de deportar un millón en el primer año de su mandato. Honduras, como uno de los principales países receptores de deportados, podría enfrentar un considerable incremento de retornados, lo que tendría efectos profundos en la economía y la estabilidad social del país.
Hernández también criticó la falta de una respuesta adecuada del gobierno hondureño, haciendo referencia a una posible amenaza de cierre de la base militar estadounidense en Palmerola, mencionada por la presidenta Castro en su discurso de Año Nuevo. El director de ASJ calificó esta medida como una «amenaza» más que una estrategia viable, mientras que países como Canadá y México han buscado reuniones con Estados Unidos para discutir el impacto de las políticas migratorias.
Desde un punto de vista económico, el sociólogo y economista Julio Raudales alertó que las deportaciones masivas podrían afectar significativamente las remesas, que son una fuente clave de ingresos para muchas familias hondureñas. Una reducción de hasta un 20% en las remesas podría generar una pérdida de hasta 1,789 millones de dólares, una cifra comparable con casi la mitad de las exportaciones maquiladoras hacia Estados Unidos.
Además, el posible fin del Estatus de Protección Temporal (TPS) para 55,000 hondureños podría agravar aún más la situación, ya que estos migrantes quedarían expuestos a ser deportados sin protección. Trump también ha amenazado con imponer aranceles a países que no controlen adecuadamente el flujo migratorio y el narcotráfico, lo que afectaría las exportaciones de Honduras, cuyo 51% de productos va destinado a Estados Unidos.
La ASJ hizo un llamado urgente al gobierno hondureño para desarrollar una estrategia integral que involucre a todos los sectores de la sociedad, con el objetivo de enfrentar los retos económicos y sociales derivados de las políticas de Trump. La organización también destacó que las consecuencias no solo serían económicas, sino que también tendrían un impacto negativo en la seguridad pública, debido al posible aumento de la criminalidad y la escasez de empleos.
Lourdes Cardona, representante del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), advirtió sobre el efecto cascada que las deportaciones masivas podrían generar, no solo en el envío de remesas, sino también en el mercado laboral y en la sobrecarga de los servicios públicos. «El reto es evitar que se afecte la estabilidad laboral y encarecer los puestos de trabajo que los migrantes deportados puedan ocupar», señaló.
Fuente: Diario Roatán.