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A varios días del derrumbe en el sector 7B, de la colonia Villa Nueva, en Tegucigalpa, la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC) comenzó trabajos de emergencia en la zona, donde 10 familias fueron desalojadas.
Tras las fuertes y constantes lluvias, la saturación del suelo provocó un deslizamiento que en vano se trató de frenar con unos contenedores, pues continuó el desprendimiento de tierra y rocas.
El derrumbe mantiene cerrado un carril de la carretera que de la capital conduce al oriente del país, generando congestionamiento vehicular en este sector de alta circulación de todo tipo de vehículos.
El coordinador de proyectos de mitigación de la AMDC, Julio Quiñónez, detalló que son 10 las viviendas que están expuestas a sufrir daños, por lo que sus habitantes ya fueron desalojados.
TIERRA ES INESTABLE
“Se siguen saturando los suelos, las precipitaciones no paran, estamos justamente en una temporada lluviosa”, señaló Quiñónez.
Los umbrales de deslizamiento, según dijo, indican que ese sector se mantiene en alerta, porque la masa de tierra está inestable y se puede seguir desplazando.
Los diferentes equipos de la AMDC realizaron trabajos de análisis y evaluación de la zona, para poder iniciar obras de mitigación del riesgo y fueron evacuadas más familias que estaban en el área de riesgo, de donde ya se había sacado a cuatro núcleos familiares.
Las obras contemplan la remoción de rocas y material suelto en donde está la falla geológica, así como proceder a la liberación del carril en la carretera a oriente.
LIBERARÁN CARRIL
A través de su cuenta en la red social X, el alcalde Jorge Aldana señaló que son varios los trabajos que se realizan en este sector, con la supervisión del personal especialista.
“Después de análisis y evaluación de la zona de desprendimiento de materiales y atención de las familias afectadas y evacuadas, iniciamos con la ejecución de las obras de emergencia en Villa Nueva, sector 7B”, explicó Aldana.
Manifestó que se removerán las rocas y material suelto en la zona de la falla y se liberará el carril que conduce hacia el oriente del país.
También se realizará una barrera con roca al pie del talud, que sirve de contrapeso y retención de material, y se desviarán las aguas lluvias y residuales en la zona alta del área afectada.
Las autoridades municipales solicitaron a la población que transita por la zona tener paciencia y precaución, ya que hay maquinaria y recurso humano trabajando en el área y el tráfico vehicular también se vuelve lento. (DS)
Fuente:LaTribuna.hn
