Diálisis de Honduras anunció la suspensión de tratamiento a pacientes renales a partir del 15 de diciembre debido a una orden judicial que exige la detención inmediata de una contratación directa para una investigación más exhaustiva. La empresa ha monopolizado los servicios durante 23 años y ganó 18 de los 22 lotes en la última licitación, lo que representa el 80 % del servicio.
La orden judicial responde a la necesidad de investigar a fondo la Contratación Directa CD-15-2023.
Ante la suspensión, hay preocupación entre los pacientes por el cambio repentino de la empresa encargada y los posibles riesgos para su salud. Sin embargo, el Ministro de Salud, Manuel Matheu, asegura que alrededor de 700 pacientes renales serán atendidos en Nefrocentro, empresa ganadora de cinco de los 22 lotes en la licitación.
Matheu niega ligues de la nueva empresa con altos funcionarios del gobierno y llama a la tranquilidad de los pacientes, resaltando la mejora en la calidad del servicio. La nueva empresa atenderá a los pacientes en Tegucigalpa, San Pedro Sula, Hospital Escuela y Mario Catarina Rivas, mientras Diálisis de Honduras seguirá brindando atención en el interior del país.