Tegucigalpa. 08.04.2023
La avenida Cervantes, en el corazón de la capital, se convirtió en una inmensa alfombra multicolores que engalanó la ciudad y atrajo a muchos admiradores del nuevo arte que se fusiona con las actividades religiosas, con motivo de la pasión de Cristo.
Como es ya tradicional, en Semana Santa, en muchas ciudades del país, los voluntarios trabajan en recrear las actividades religiosas con el arte, importado de México.
Las atractivas alfombras son ahora un elemento que le pone belleza y color a la Semana Santa, donde voluntarios y auspiciadores de esta actividad se unen para mostrar lo mejor de sí, como en esta ocasión.
Cada Viernes Santo las calles lucen alfombradas de decenas de sacos de aserrín colorido que sirve para recrear la vida de Jesús, recordar la naturaleza, así como mostrar los signos de fe y religiosidad.