Unos 160 millones de niños trabajan alrededor del mundo, 79 millones realizan trabajos peligrosos actualmente

Tegucigalpa,Honduras  lunes 13  junio 2022

Expertos en Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) instan a tomar medidas para “abordar el alarmante aumento del trabajo infantil en el sector agrícola”, considerando el beneplácito o adopción del llamado de Acción de Durban el pasado 20 de mayo de este año, que promueve la eliminación de la trabajo infantil.

En el acuerdo llamado de la Acción de Durban para la Eliminación del Trabajo Infantil, se integran representantes de gobiernos, organizaciones de trabajadores y empleadores, agencias de la ONU, organizaciones regionales y de la sociedad civil que asistieron a la 5ª Conferencia Mundial sobre la Erradicación del Trabajo Infantil en Sudáfrica, donde se conocieron las estadísticas a nivel mundial.

Se informó, que en el 2020, el número de niños en situación de trabajo infantil en todo el mundo ascendió a 160 millones, el primer aumento registrado en 20 años; en la actualidad, alrededor de 79 millones de niños realizan trabajos peligrosos. 

El setenta por ciento del trabajo infantil se concentra en el sector agrícola con un estimado de 108 millones de niños trabajando en granjas y plantaciones en todo el mundo, lo que puede causar efectos adversos para la salud a corto plazo y crónicos.

Detalla que el mismo sistema agrícola que disminuye la biodiversidad y aumenta la contaminación perjudica a los niños, incluye a decenas de millones de niños que realizan trabajos peligrosos, en los que a menudo están expuestos a productos químicos tóxicos, incluidos pesticidas altamente peligrosos.

Hasta el día de hoy, los niños que trabajan en la agricultura continúan estando expuestos a pesticidas peligrosos que están prohibidos en el país de exportación, lo que resulta en un doble rasero y una discriminación abominables.

A menudo ocurre que después de la exposición a pesticidas tóxicos, la violación del derecho de un niño a la integridad física por los tóxicos no se puede deshacer. En este sentido, a menudo se descuida a los trabajadores agrícolas y existe una necesidad urgente de que los Estados y las empresas aborden el dramático aumento del trabajo infantil en el sector agrícola en todo el mundo.

l Llamado enfatiza la necesidad de una acción urgente porque la pandemia de COVID-19, los conflictos armados, junto con el cambio alimentario, humanitario y climático amenazan con revertir años de progreso contra el trabajo infantil.

“Nos hacemos eco del llamado a tomar medidas urgentes para abordar esta tragedia y seguimos profundamente preocupados porque millones de niños más pronto se verán obligados a trabajar, lo que puede poner en grave peligro su salud física y mental”

El trabajo infantil también produce un impacto estructural en el disfrute de otros derechos humanos, incluidos los derechos a una vivienda adecuada, la educación, el derecho al más alto nivel posible de salud, el derecho a un medio ambiente saludable y, a menudo, tiene sus causas fundamentales en formas estructurales, raciales y de otro tipo de discriminación.

El Llamado a la Acción de Durban incluye 49 medidas inmediatas y efectivas que los gobiernos deben tomar para poner fin al trabajo infantil con énfasis en la agricultura.

Lo que es más importante, esto incluye la adopción de un plan de acción para eliminar los obstáculos al establecimiento, crecimiento y realización de actividades legales de las organizaciones de trabajadores rurales para dar a los trabajadores agrícolas un papel en el desarrollo económico y social.

El Llamado a la Acción incluye además un compromiso para reducir la pobreza y mejorar las condiciones laborales de todas las personas que trabajan en las comunidades rurales, incluidos los campesinos, pescadores, habitantes de los bosques y pastores. Recomienda poner fin a su dependencia funcional del trabajo infantil, asegurando ingresos adecuados a través de cooperativas y organizaciones representativas en línea con los instrumentos relevantes de la OIT, reevaluando los sistemas salariales a destajo en la agricultura; y reconociendo la necesidad de garantizar salarios mínimos adecuados para los trabajadores agrícolas, suficientes para satisfacer sus necesidades.

Fortalecer la protección social también es clave para eliminar el trabajo infantil. Protege a los hogares de la pobreza extrema que, de lo contrario, podría llevar a sacar a los niños de la escuela y ponerlos a trabajar.

Si bien puede haber un lugar para los niños excepcionalmente y ocasionalmente ayudando en granjas familiares, el lugar de los niños está en la escuela.

 

Al prohibir el trabajo infantil, los gobiernos también deben garantizar que se cumplan las condiciones necesarias para el aprendizaje, incluida una nutrición adecuada, agua y saneamiento, atención médica, libros y uniformes proporcionados de forma gratuita. La pobreza no puede ser una razón para que los niños no estén en las escuelas.

Los gobiernos deben actuar con rapidez, eficacia y continuidad para mejorar las condiciones de trabajo en las granjas y plantaciones a fin de proporcionar empleo decente y eliminar el trabajo infantil. Las empresas comerciales deben contar con procesos de debida diligencia para garantizar que no haya trabajo infantil en las cadenas de suministro y, cuando se encuentre, para responsabilizar a todas sus subsidiarias, contratistas y subcontratistas de acuerdo con los Principios Rectores sobre Negocios de la ONU y Derechos Humanos.

Los gobiernos deben garantizar que todos los actores involucrados en el uso del trabajo infantil rindan cuentas.

Los gobiernos deben implementar rápidamente los instrumentos que ya existen. Por ejemplo, el Convenio de la OIT sobre el derecho de asociación en la agricultura es clave para eliminar el trabajo infantil y lograr un trabajo decente para los adultos en la agricultura. Alentamos a los Estados a ratificar, domesticar e implementar las normas internacionales del trabajo.

También alentamos encarecidamente a los gobiernos a implementar la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Campesinos y Otras Personas que Trabajan en Áreas Rurales.

Finalmente, esperamos ver una conferencia para dar seguimiento al Llamado a la Acción y el desarrollo de estrategias para una mejor coordinación y cooperación internacional para eliminar todas las formas de trabajo infantil, especialmente en el sector agrícola”.

Procedimientos Especiales del Consejo de Derechos Humanos, este sistema de “Procedimientos Especiales”, el organismo más grande de expertos independientes en el sistema de derechos humanos de la ONU, es el nombre general de los mecanismos independientes de investigación y monitoreo del Consejo que abordan situaciones específicas de países o problemas temáticos en todas partes del mundo, trabajan de forma voluntaria; no son personal de la ONU y no reciben un salario por su trabajo. Son independientes de cualquier gobierno u organización y sirven a título individual.

En Honduras, los últimos registros establecen que total nacional de casos identificados de trabajo infantil es de 412,122 menores trabajadores de edades comprendidas entre los 5 y los 17 años, de los cuales el 74.6% son varones y el 25.4% mujeres. El 3.7% de estos niños y jóvenes tienen de 5 a 9 años; el 40.7% de 10 a 14 años y el 55.6% tienen de 15 a 17 años, al 2021.

Fuente: La Tribuna